No dañe su Navidad por uso inadecuado de medicamentos

El uso incorrecto de medicamentos en todo el mundo se disparó con la aparición de la COVID-19, según datos compartidos por la Organización Panamericana para la Salud (OPS) que reflejan la ‘urgente’ necesidad de prevenir el contagio por el virus. Sin embargo, esta automedicación podría traer graves problemas de salud a largo plazo y, más aún, teniendo en cuenta que por lo menos la mitad de las medicinas que a nivel mundial se prescriben, dispensan o venden se hacen de una forma inapropiada, y donde aproximadamente el 50% de los pacientes no toma sus medicamentos de forma correcta”.

“Los efectos segundarios por el uso incorrecto de medicamentos puede afectar de forma significativa el estado de salud de las personas, pero es un problema que pasa desapercibido para la mayoría de ellas y más ahora que las luces del mundo continúan apuntando a la pandemia de la COVID-19. Pese a ello debemos ser responsables y seguir estrictamente las indicaciones de uso en cada uno de los medicamentos formulados por los profesionales de salud” afirmó el Dr. Luis Guillermo Jiménez Villa, director científico de Laboratorios La Santé.

Consecuencias del mal uso de medicamentos

La automedicación es la utilización de medicamentos por iniciativa propia de las personas sin ninguna intervención médica con el propósito de prevenir, aliviar o tratar síntomas o enfermedades leves que ellas mismas puedan identificar, una práctica cotidiana y habitual en la mayoría de los hogares.

Entre los medicamentos prescritos con mayor frecuencia se destacan los antibióticos, estas medicinas que combaten infecciones causadas por bacterias en los seres humanos y los animales matando las bacterias o dificultando su crecimiento[4], son los de mayor uso incorrecto en la automedicación siendo usados para el tratamiento de diarrea, gripa, tos, entre otros. El uso frecuente de ellos y una mala dosificación a las recomendadas pueden generar una resistencia a las bacterias, como consecuencia de esta se genera un fenómeno denominado resistencia a los antimicrobianos (RAM).

La RAM se produce cuando los microorganismos (bacterias, hongos, virus y parásitos) sufren cambios al verse expuestos a los antimicrobianos (antibióticos, antifúngicos, antivíricos, antipalúdicos o antihelmínticos). Como resultado, los medicamentos se vuelven ineficaces y las infecciones persisten en el organismo, lo que incrementa el riesgo de propagación a otras personas.[5]

“Este fenómeno ha sido declarado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una de las 10 principales amenazas de salud pública a las que se enfrenta la humanidad, por eso queremos sensibilizar a toda la población colombiana sobre el uso adecuado de medicamentos, evitando la automedicación y visitar ante cualquier problema de salud a el personal médico”, asegura el Dr. Jiménez.

Los retos de Colombia en la resistencia antimicrobiana

Nuestro país no es ajeno a la problemática mundial de resistencia antimicrobiana, según diversos estudios, hay bacterias que cada día son más resistentes y que causan seria preocupación en diferentes entornos. Es por esta razón el país trabaja en conjunto con diversas entidades como la Unión Europea (UE), organismos globales e instituciones a nivel local y nacional, para concientizar sobre este fenómeno fomentando la investigación y vigilancia sobre el mismo.

Sin embargo, existen algunas recomendaciones para mitigar la resistencia antimicrobiana en Colombia:

Evitar la automedicación y hacer uso racional de los mismos porque al administrarlos innecesariamente pueden crear mayores complicaciones en el tratamiento de enfermedades a futuro.

Cuando tome antibióticos, se debe hacer de forma adecuada siguiendo las instrucciones de uso, tiempo de tratamiento y cantidad formulada por el profesional de la salud. Los medicamentos están diseñados para tratar enfermedades específicas, el profesional de la salud quien formuló conoce a profundidad el tratamiento más efectivo para la enfermedad.

Aumentar la dosis de antibiótico ni ayuda a que la persona se recupere más rápido, en cambio aumenta el riesgo de efectos secundarios: Aumentar la dosis de un medicamento puede generarle una intoxicación y tener un efecto adverso en su cuerpo.

Los antibióticos no sirven para curar infecciones causadas por virus como el de la gripa: los antibióticos son fármacos que se utilizan para combatir las infecciones causadas por bacterias, no tienen ningún efecto en contra de los virus.

Finalmente, en caso de que los síntomas persistan con el uso adecuado del tratamiento, consulte nuevamente a su médico.