Una de las prohibiciones durante la cuarentena fue el uso de las playas del país y sus paseos en embarcaciones, acción que desde el fin de semana se puede realizar, pero que tuvo varios sancionados por no acatar las normas de bioseguridad.
El epicentro de la indisciplina fue la bahía de Cholón, en la zona insular de Cartagena, lugar donde llegaron una docena de yates repletos de personas sin ninguna norma de bioseguridad, violando las normas del distanciamiento social.
El talón de Aquiles de estas personas, en su mayoría jóvenes, fue que subieron varios videos a sus redes sociales en los que se les ve bailando y bebiendo en las embarcaciones, pero sin tapabocas y sin guardar la distancia debido, en la mayoría de los casos, a que las embarcaciones tenían sobrecupo y su espacio es reducido.
La Capitanía de Puerto intervino varias embarcaciones y expidió sanciones a tripulantes y pasajeros. Algunos de los yates y veleros intervenidos serán multados y se estudia la posibilidad de restringirles la movilidad.
Al cumplirse el primer mes de la reapertura del sector náutico, la Capitanía de Puerto registra el movimiento de 3.158 pasajeros y 597 embarcaciones que se han movilizado desde la ciudad hasta la zona insular.
La Capitanía de Puerto de Cartagena hizo un llamado al gremio marítimo y comunidad en general a continuar acatando las medidas de bioseguridad y distanciamiento establecidos para el sector náutico.
También, pide hacer uso de los elementos de seguridad a bordo de las embarcaciones, respetar los horarios establecidos para zarpes y arribo acorde al tipo de motonave, y mantener los niveles de ruido permitidos en la bahía (50 decibeles), entre otros.