El chavismo ganó con comodidad unas elecciones parlamentarias marcadas por la abstención, las acusaciones de fraude, el rechazo internacional y el vacío opositor, que no presentó candidatos.
Pasada la medianoche en Caracas, el Consejo Nacional Electoral (CNE), un ente al que el antichavismo acusa de presunta parcialidad, anunció que los candidatos que responden a Nicolás Maduro obtuvieron el 67,6% de los votos emitidos, unos 3.558.320. La abstención, clave para evaluar la legitimidad de la elección, fue del 70%.
“Hemos tenido una tremenda victoria electoral”, dijo el presidente tras el primer reporte.
El resultado asegura al Gran Polo Patriótico, la coalición de partidos aliados que acompaña al oficialista Partido Socialista de Venezuela, aproximadamente 240 de los 277 escaños en elección. Bastante más atrás, con el 18% en total, quedaron los partidos opositores que decidieron asistir a la cita.
Destacaron la facción disidente de Acción Democrática, Cambiemos, de Timoteo Zambrano; Avanzada Progresista, liderado por Henri Falcón; y la formación El Cambio, conducida por Javier Bertucci.