La jueza Vivian Polanía ha sido severamente sancionada debido a su participación en un video escandaloso que tuvo lugar en el Palacio de Justicia de Cúcuta. Las imágenes de naturaleza inapropiada fueron vehementemente repudiadas por la Comisión de Disciplina Judicial de Norte de Santander.
En dicho video, la jueza Polanía aparece sentada en una silla, mientras un hombre, vestido con un delantal y el torso descubierto, le realiza un baile sugerente y le ofrece un waffle con forma fálica.
Las autoridades disciplinarias habían ordenado investigar a los funcionarios y empleados de la Rama Judicial que participaron en los videos durante una celebración en el marco del Día del Amor y la Amistad.
El Consejo Seccional de la Judicatura de Norte de Santander condenó enfáticamente las actividades llevadas a cabo y emitió una circular a los funcionarios para recordarles la importancia de mantener un comportamiento apropiado en los espacios públicos.
Por su parte, la Comisión de Disciplina Judicial de Norte de Santander ha tomado medidas drásticas contra la jueza Polanía al ordenar su suspensión provisional por un período de tres meses.
«La jueza llevó a cabo un acto indecoroso e inapropiado en las instalaciones del Palacio de Justicia de Cúcuta, ante la sorpresa de sus compañeros de trabajo, a quienes involucró de manera inesperada en el acto mencionado», se establece en la resolución.
«Su acción fue premeditada y abusiva, realizada frente a sus colegas de trabajo, lo que demuestra una conducta calculada que podría dañar la imagen de la Justicia», se enfatiza, subrayando que este comportamiento afecta la confianza de la ciudadanía en la prudencia, equilibrio y austeridad que se espera de quienes administran la justicia en Colombia.
Como consecuencia de esta sanción, la jueza Polanía no recibirá salario durante los próximos tres meses, aunque tiene la opción de apelar esta decisión.
Vivian Polanía ha argumentado que se encuentra incapacitada debido a la presión y críticas que ha enfrentado desde la difusión del video. En una reciente aparición en el programa de televisión Sin Carreta, insistió en que su intención era simplemente pasar un rato agradable y que el tono del evento era más humorístico que erótico.
Polanía también señaló que las críticas hacia ella fueron desproporcionadas, especialmente considerando que había otros funcionarios judiciales presentes en la celebración, algunos de los cuales estaban consumiendo alcohol durante el horario laboral en el Palacio de Justicia.
Además, mencionó problemas de salud que la han llevado a considerar la posibilidad de renunciar a su cargo como jueza de control de garantías, incluyendo una infección en la garganta y un síndrome de depresión que la mantuvo incapacitada durante un extenso período el año anterior. En medio de su emotiva declaración, confesó que atraviesa un momento muy difícil y que incluso le resulta difícil levantarse de la cama.