Investigan a funcionarios del Inpec que daban ‘beneficios’ a reclusos

Un grupo de funcionarios del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) está siendo investigado por las autoridades debido a las sospechas de que habrían constituido un ‘cartel’ que solicitaba sobornos a cambio de conceder beneficios a los reclusos en diversas prisiones del país, particularmente en la cárcel La Picota en Bogotá.

Se presume que más de una docena de dragoneantes participaron en actividades irregulares dentro de las instalaciones carcelarias, siendo descubiertos a raíz de una intensa colaboración entre el Inpec, su unidad de investigación y una delegación de la Fiscalía dirigida por el director del Inpec, el coronel Daniel Gutiérrez.

El supuesto catálogo de beneficios ilícitos incluiría la introducción de celulares, licor y drogas, además de la solicitud de dinero a cambio de permisos especiales, el ingreso de visitas y la presencia de prostitutas en la prisión.

Las autoridades están llevando a cabo una investigación en curso con el propósito de identificar y desmantelar esta red de funcionarios de la institución que ya se encuentra bajo escrutinio por parte de la unidad del Inpec, la Fiscalía y agentes de la Policía Judicial. Su tarea es recopilar pruebas y testimonios fundamentales.

Uno de los testigos clave en este proceso es el exalcalde de Cúcuta, Ramiro Suárez, del cual se habrían obtenido grabaciones que mencionan la corrupción de algunos funcionarios en la cárcel La Picota.

Existen informaciones que sugieren que esta red estaba altamente estructurada y compuesta por miembros de la institución que se habrían afiliado a sindicatos para aprovechar su posición y evadir los controles internos del Inpec.

A pesar de esta situación, la entidad ha recibido varias denuncias presentadas por otros dragoneantes sobre las actividades irregulares de sus colegas. Algunas de estas denuncias, además de describir el mencionado catálogo que se presume era ofrecido a los reclusos, también incluyen quejas acerca de cobros efectuados por los sindicalizados a otros funcionarios para ganar influencia en los sindicatos.