Con una corta y muy sentida ceremonia en la que tomaron la palabra los presidentes del Senado y la Cámara de Representantes, además de la familia, quedó instalada la cámara ardiente en la que estará el maestro Fernando Botero Angulo, hasta el próximo lunes en el Salón Elíptico del Capitolio Nacional.
A las once de la mañana, como se había previsto, llegó el coche fúnebre con los restos del pintor, de inmediato fue instalado en el Salón Elíptico, acompañado por sus hijos Fernando y Lina, además de otros miembros de su familia. Allí fueron recibidos por los presidentes del Congreso, Iván Name, presidente del Senado y Andrés Calle, presidente de la Cámara.
Tras la lectura de una resolución con la moción de duelo que fue aprobada por la mesa directiva del Congreso en donde se resalta la labor, compromiso y aporte del artista para Colombia, monseñor Sergio Pulido, hizo una oración, en la que resaltó el valor de la vida y de la forma como la pudo aprovechar el maestro Botero.
Luego intervino el presidente del Senado, Iván Name, quien señaló que “hoy es un día en que no pudimos cantar la primera estrofa del himno porque estábamos compungidos. No sabíamos cómo hacer esa despedida, hemos despedido a los mortales, a los heroicos colombianos, pero nunca habíamos despedido a un hombre universal. No sabíamos cómo debían sonar las trompetas, los tambores, nuestros soldados, nuestros honores a un hombre que detuvo el mundo por un instante y no lo hizo con la palabra de la política, del poder, de la oratoria, lo hizo con un pincel y con sus manos”.
Name, en el cierre de su discurso destacó que será un colombiano que con su legado siempre seguirá importando al mundo. “Algún día alguien lo pintará en una banca del parque de cualquier parte del mundo, mientras él sigue pensando en el mundo y el mundo seguirá pensando en él. Hoy la patria conmovida lo siente y el mundo hace una pausa para decir que siempre estará presente porque es un hombre universal, de los pocos inmortales”.
Entre tanto el presidente de la Cámara, Andrés Calle Aguas, destacó el compromiso que siempre tuvo Botero para que Colombia pudiera ser un país que estuviera en paz, “ese sueño del maestro Botero es un sueño compartido con millones de colombianos y colombianas que tenemos la fe intacta, que creemos en la reconciliación de nuestros pueblos para alcanzar la tan anhelada paz de Colombia, esa Colombia que Botero quiso toda su vida y que fue su inspiración”.
Indicó además que “ese anhelo solo será posible si juntos nos comprometemos al apoyo y al respeto mutuo, sólo será posible cuando comprendamos que se puede amar en medio de las diferencias porque no podemos desconocer que convergemos en un mismo espacio, pero con seres diversos que merecen ser reconocidos. Para ese sueño, ya hemos dado grandes pasos, no retrocedamos”.
Por la familia hablaron Lina Botero y Fernando Botero Quintana, hija y nieto del maestro, quienes agradecieron al Congreso y a los colombianos por el homenaje al colombiano más colombiano que pese a haber vivido muchos años fuera del país supo interpretar el sentir de todos sus habitantes. “Queremos agradecer la forma como recuerdan un colombiano… mi padre decía que para ser universal debía ser local”, dijo Lina Botero.
Los colombianos y extranjeros que deseen dar su último adiós al maestro Fernando Botero lo pueden hacer este viernes entre las 2:00 y las 4:00 de la tarde, mientras que sábado y domingo entre 9:00 de la mañana y las cuatro de la tarde. El lunes no estará abierto el Capitolio Nacional, tan sólo se ha previsto una misa en la catedral Primada a las 10:00 de la mañana.