Columna, La reforma a la salud

Empoderando vidas

Por estos días hemos visto y escuchado en los medios de comunicación de nuestro país, que se habla de varias reformas por parte del gobierno y una de ellas es la reforma a la salud.

No es un secreto que nuestro sistema de salud requiere de cambios y esto se evidencia en el comportamiento creciente del uso de la acción de tutela, el año pasado la defensoría del pueblo reportó  que entre enero y septiembre de 2022 se presentaron 109.825 tutelas que invocaron el derecho a la salud, es decir 12.203 tutelas mensuales en promedio, hubo un aumento de  58,31% respecto al año anterior, lo que nos demuestra se ha aumentado la brecha de inequidad tanto en el aseguramiento como en el acceso a servicios de salud con oportunidad, calidad, seguridad, eficacia y dignidad.

Cuando se comenzó a hablar de la reforma a la salud hace algunos meses, se terminó  generando gran expectativa y controversia,  había tanta información y desinformación al mismo tiempo, que ya no se sabía ni que pensar, no se conocía el texto y sin embargo no se hablaba de otra cosa, finalmente el 13/02/2023 el ministerio de salud radicó el proyecto de ley PL 339 en la comisión séptima de la cámara de representantes y días después se radicaron cuatro propuestas más de reforma a la salud, entre ellas la PL 341 esta propuesta  tiene como elemento fundamental la progresividad y no regresividad, fue realizada por pacientes Colombia un movimiento de la sociedad civil que agrupa 195 organizaciones, fundaciones, ligas, y observatorios de pacientes de diferentes enfermedades.

Mi abuela decía: “el que no sabe, es como el que no ve”, para saber cómo me beneficia o me afecta la propuesta realizada por el gobierno, sí o sí tenía que leerme todo el articulado y no faltó quien al verme leyendo y releyendo hoja tras hoja,  me dijera que si yo no tenía más oficio, pero cuando se es paciente de cáncer como yo y la vida depende de un tratamiento integral,  oportuno, con calidad, continuidad, seguridad, eficacia y dignidad, pues obvio que hay que implicarse y hay que leer,  asumo que al igual que todos los colombianos quiero que la reforma que se apruebe sea garante del goce efectivo del derecho a la salud.  

La propuesta del gobierno tiene aspectos en los que varias de las propuestas radicadas en la comisión 7 de la cámara coinciden,  como el mejoramiento de la infraestructura pública, el fortalecimiento de la atención primaria, el mejoramiento de  la oportunidad en los servicios especializados, el acceso en zonas rurales a servicios de salud, el mejoramiento del sistema de información y la formación del talento humano procurando su formalización laboral en condiciones dignas.

Pero también es cierto que después de leerme todo el articulado, hay cosas que  no me quedan muy claras y me generan interrogantes,  espero encontrar las respuestas a medida que se desarrollen los diferentes debates en la cámara y el senado.

·        Cuando se habla de presupuestos, no identifico que porcentaje del presupuesto que será asignado  para el manejo integral de las enfermedades de alto costo,  enfermedades huérfanas y crónicas.

·        ¿Quién hará la gestión del gasto?  ¿Quién va a vigilar el uso correcto de los recursos para que no terminemos otra vez   con la corrupción a cuestas y los pacientes sin tratamiento?

·        ¿Cómo se garantizará que no se politice la salud en los territorios?

·        ¿Cuál o cuáles serán las fuentes de financiación para el desarrollo de la reforma a la salud que permitan la sostenibilidad del sistema?

·        ¿Quién hará la gestión del riesgo?

·        ¿Continúa el plan de beneficios en salud o desaparece?  si desaparece ¿Cómo sé a qué servicios accederé y a cuáles no? el contenido del plan de beneficios en salud, es algo en lo que se ha avanzado durante varios años y es terreno ya ganado en el acceso a tecnologías en salud y considero que se debe seguir construyendo a medida que la ciencia avance.

·        ¿Cómo va a ser la dispensación de medicamentos? ¿Se garantizará el abastecimiento de medicamentos de tal forma que nunca nos falte el medicamento requerido?

·        ¿Se garantizará siempre la mejor opción terapéutica?

·        ¿Cuál va a ser la ruta de atención para los pacientes de alto costo y enfermedades huérfanas que ya estamos en tratamiento? somos aproximadamente 7 millones de pacientes

·        ¿Debemos ir a inscribirnos en el CAP y empezar de cero cuando ya llevamos un camino recorrido en nuestro tratamiento?

·        ¿Se nos direccionará a los mismos centros de atención especializada donde estamos actualmente en tratamiento así sean privados?

·        ¿Qué pasará con los pacientes de alto costo y enfermedades huérfanas durante la transición del sistema de salud?

·        Sí estamos inconformes con el servicio que nos prestan en el CAP asignado, ¿Podremos cambiar de centro de atención primaria?

·        ¿Habrá libre escogencia dentro de la red de prestadores en caso de requerir una atención especializada? ¿Se afectará la libre escogencia?

·        Si no se presta el servicio de salud requerido, arriesgando o afectando mi salud, ¿La tutela a quién se le interpone? al estado, al adres, a la alcaldía, la gobernación, a minsalud, es algo que no me queda claro,  ¿Quién responde?.

·        Hay pacientes que ya tenemos una tutela donde se concede la atención integral, ¿Cómo se garantizará el cumplimiento de ese fallo en el nuevo sistema de salud?

·        ¿Los pacientes que hoy reciben los medicamentos en su domicilio por condiciones especiales seguirán recibiéndolo en su casa?

·        ¿Qué mecanismos existirán para la inscripción en el CAP?

·        ¿Cómo se va a garantizar que no aumente el gasto de bolsillo de los colombianos en lo referente a salud?

·        Me preocupa que con la creación de tantas redes haya más burocracia y termine afectando el goce efectivo del derecho a la salud, se van a crear 7 redes distintas pero no me queda claro si habrá integración entre ellas  a nivel territorial,   ¿Si no hubiera  integración, esto no sería un riesgo de fragmentación?

Estos son algunos de los interrogantes que me han quedado después de leer el articulado, sin duda necesitamos una reforma a la salud, eso es clarísimo,  se necesita una reforma consensuada, sin forcejeos políticos,  para construir entre todos el sistema de salud que merecemos los colombianos, un sistema por el que tanto hemos abogado,  un sistema sostenible, que garantice sin barreras el goce efectivo del derecho a la salud.

Solo me resta decirle a los honorables senadores y representantes de la cámara que en sus manos está su salud, la de sus familias, sus amigos, sus trabajadores y la salud de todos  los colombianos , de los colombianos que los eligieron, decidan sabiamente. 

Nury Esperanza Villalba Suarez.