Funcionarios del Servicio Geológico Colombiano que laboran en su sede del Observatorio Vulcanológico y Sismológico (SGC) de Manizales se desplazaron hacia el volcán Nevado del Ruiz con el objetivo de realizar mantenimiento preventivo y correctivo de emergencia en algunas de sus estaciones de monitoreo volcánico que han sido afectadas por las recientes emisiones de ceniza.
La ceniza depositada sobre las estaciones hace que algunos componentes mecánicos de equipos de monitoreo dejen de funcionar, pero sobre todo, impiden que los paneles solares de las estaciones provean la energía necesaria para que toda la estación opere.
Producto de los trabajos realizados, se logró recuperar la comunicación vía telemétrica con 6 estaciones de monitoreo volcánico, las cuales proveen datos en tiempo real de sismicidad, deformación del suelo y emisiones de gases del volcán Nevado del Ruiz.
De acuerdo con el SGC, durante el tiempo que ha transcurrido desde el 14 de octubre hasta el día de hoy, el volcán continuó mostrando un comportamiento inestable. La actividad sísmica siguió siendo intensa, principalmente, la relacionada a movimiento de fluidos al interior de los conductos volcánicos. (…) Adicionalmente, se presentó un leve incremento en la sismicidad generada por el fracturamiento de roca.
Inicialmente, explican, esa sismicidad se caracterizó por movimientos volcánicos continuos pero que mantienen un nivel entre bajo y moderado. No obstante, en el transcurso del último mes se han detectado pulsos de tremor, sismos de largo periodo y muy largo periodo con niveles energéticos variables, principalmente en el cráter Arenas.
“Adicionalmente, se presentó un leve incremento en la sismicidad generada por el fracturamiento de roca, en general de energía baja a moderada, localizada en el cráter Arenas a profundidades menores a 2 km, y en fuentes proximales y distales al cráter, a profundidades entre 2 y 5 km, y entre 4 y 7 km, respectivamente”.