El gobernador de Antioquia, Luis Fernando Suárez, decretó una medida de toque de queda en Medellín y Antioquia para frenar el crecimiento de contagios de COVID-19 en el departamento.
La primera de ellas fue quitar una hora al toque de queda en Medellín y los otros nueve municipios del Valle de Aburrá: Barbosa, Girardota, Copacabana, Bello, Itagüí, Envigado, Sabaneta, La Estrella y Caldas.
Además, en nueve municipios del oriente antioqueño: Rionegro, El Santuario, Marinilla, El Retiro, Guarne, La Ceja, El Carmen, San Vicente y La Unión.
En estos 19 municipios, el toque de queda regirá a partir del lunes 5 de abril a las 6:00 p.m. hasta las 5:00 a.m. del día siguiente, contrario al que estaba estipulado, que comenzaba a las 5:00 p. m.
Además, en el resto del departamento regirá entre las 8:00 p.m. hasta las 5:00 a.m.
Suárez también indicó que habrá ley seca, aunque se explicó que el expendio de licores será permitido mediante domicilios.
El pico y cédula será obligatorio también (días pares las cédula que terminan en par y los impares, las que terminan en impar).
“Con alcaldes del Valle de Aburrá y oriente vamos a gestionar para que las dos próximas semanas no haya actividades presenciales en colegios públicos y privados en estos municipios”, dijo.