El senador del partido opositor Centro Democrático Miguel Uribe Turbay aseguró que el presidente, Gustavo Petro, habla de un «país que no existe», al tiempo que criticó la inseguridad, los escándalos de corrupción del Gobierno y los asesinatos de líderes sociales. «Tenemos horas escuchando la descripción de un país que no existe y muy distante al que vivimos todos los días. Presidente, usted ha venido a hablarnos de sueños y fantasías, supongo, que es porque pasa más tiempo soñando que despierto», dijo el legislador durante el discurso de réplica de la oposición en la instalación del Congreso que hizo Petro.
Uribe Turbay recalcó que en los dos años que lleva Petro gobernando han sido asesinados 334 líderes y se contabilizan más de 170 masacres. «Y nos duele en el alma, como por su indiferencia están matando policías en el Cauca», dijo el congresista al referirse a la ola de violencia desbordada que golpea a ese departamento del suroeste del país. También, arremetió contra la reforma de pensiones aprobada en el Congreso porque «no resuelve los problemas del sistema actual, pone en riesgo el ahorro pensional y condena a nuestros jóvenes a nunca pensionarse».
Igualmente dijo que una posible constituyente solo le sirve al Gobierno y a los políticos tradicionales. Sin embargo, dijo que en Colombia «no habrá constituyente, y menos por fuera de la ley, ni tampoco ‘fast-track’ para violar la Constitución. No se lo vamos a permitir», advirtió.
Petro propuso en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas un plazo suplementario de siete años para implementar los Acuerdos de Paz en sus tres vertientes principales: reforma agraria, inclusión territorial y unificación del sistema judicial de verdad y reconciliación.
Allí reconoció que todas sus propuestas necesitarán primero un gran pacto nacional con «la mitad de la población» que se oponen a los acuerdos de paz, y para vencer esa oposición abogó por lo que llamó un ‘fast track’, un mecanismo legislativo que permita aplicar las reformas más urgentes por procedimientos rápidos, de modo que esas reformas tengan una traducción inmediata.
Por otro lado, el representante de la bancada del partido Verde Oxígeno, Daniel Carvalho, aseguró que no cree que el presidente Petro sea corrupto, pero, acotó, cree que «en su afán de llegar al poder se alió con personas indecentes y adquirió comportamientos que empañaron su proyecto de cambio».
Así mismo, sostuvo que «este país, que mayoritariamente creyó en usted, ahora lo ve permanentemente atacando a la prensa, irrespetando al Congreso y, además, con una cantidad de funcionarios y aliados implicados en casos graves de corrupción».
«Nada de eso hubiera sido tolerado por el congresista Gustavo Petro. Usted está haciendo todo por devolverle el poder a la derecha que tanto combatió», señaló Carvalho. Igualmente remarcó que «el balance es negativo en su Gobierno» y enfatizó en que Petro es un «mal administrador», al tiempo que recordó las palabras del presidente de que se aburría en la Casa de Nariño: «Se le nota el aburrimiento ante la desidia que asume algunas tareas del Estado y la incapacidad de mantener una agenda».
En el discurso de hoy, con motivo de la instalación del nuevo periodo de sesiones del Congreso, en la celebración del Día de la Independencia colombiana, Petro propuso nuevamente un «acuerdo nacional» y pidió perdón por el escándalo de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), que salpica a legisladores, ministros y otros altos funcionarios de su Gobierno.