En Colombia han existido un sinfín de posibilidades de negocios donde la gran mayoría de ofertas prometen rendimientos muy altos en poco tiempo. Por lo general, estos proyectos están relacionados con estafas, muchas de ellas basadas en esquemas piramidales que pagan a quienes han invertido primero con el dinero de las personas que suman. Por esta razón, antes de invertir, es necesario saber cómo reconocer negocios serios y así proteger nuestro dinero.
En la década de 1920 surgió el término «esquema Ponzi», nombrado así por la estafa que convirtió a Carlo Ponzi en millonario en tan solo unos meses y por la que fue sentenciado a prisión. Él notó que si el monto a invertir disminuía, aumentaban las posibilidades de unir a más personas. Además, al prometer beneficios a quienes agregaran a otros inversores, logró que las personas convencieran a otras de sumarse.
Históricamente, miles de colombianos han sido víctimas de estos fraudes, ya que el país es la tercera nación de América Latina más afectada por los fraudes de este tipo. Por esa razón, a continuación se desarrollaran algunos consejos para identificar estos esquemas fraudulentos y evitar caer en ellos:
Contacto inesperado en redes sociales: A través de estas plataformas es común encontrar historias de quienes son contactados por antiguos compañeros de escuela, amistades de la infancia o completos desconocidos, que ofrecen grandes rendimientos para su dinero. Al igual que Ponzi, muchas veces invitan a la persona a probar con sumas reducidas de dinero con las que pagan altos rendimientos para generar confianza e incentivarlos a aumentar la cantidad de la inversión y después huir con ese dinero.
Promesas de rendimientos fijos: Quienes tienen mayor experiencia saben que las inversiones no tienen una ganancia fija, y que mayores rendimientos implican mayor riesgo o volatilidad, lo cual aplica tanto para criptomonedas como para cualquier activo o divisa. Las promesas de rendimientos determinados o estables pueden tomarse como indicio de algún fraude.
Sitios web confusos y sin fundamento: Es importante conocer qué se está haciendo con el dinero que invertimos y de dónde provienen las ganancias prometidas, si la información no está disponible o resulta confusa, también puede tomarse como una señal de alerta.
Invitar a otras personas a participar como requisito: Si a causa de la inversión es obligatorio invitar a otras personas para aprovechar la «oportunidad» o formar una red, lo más probable es que estés construyendo una pirámide que pronto será insostenible.
Petición de pagos adicionales para retirar activos: Del mismo modo hay que desconfiar de la solicitud de nuevos pagos para retirar rendimientos y la propia inversión.