En una semana de noticias positivas en materia macroeconómica, el precio del dólar registró una de sus mayores caídas en lo corrido del año.
La divisa se cotiza en promedio a 3.977 pesos, situación que no se regustraba hace 123 meses.
La semana pasada se tocaron mínimos de 4.052 pesos, que llevaron al precio del dólar a estar por debajo de los 4.000 pesos en las casas de cambio. La compra ya está entre los 1.970 pesos.
Para el mercado financiero, los niveles de la tasa de cambio se ajustan a la realidad de los precios y a la estabilidad de las economías.
El precio del dólar sigue respondiendo a factores externos y dependerá de la tendencia en materia de inflación y futuras decisiones de la Reserva Federal.
La curva de caída es sostenida y muchos analistas incluso auguran que pronto se podrá ver el precio en los 3.900 pesos.
Ahora, a unas semanas de cumplirse un año del mandato de Petro, el dólar ha dado una tregua. El viernes, en su última negociación, cerró en 4.053 pesos, según la Bolsa de Valores de Colombia, y en promedio se cotizó en el día en 4.089 pesos. La moneda local se ha convertido en la más revaluada del mundo, senda que tomó desde comienzos de este año.
El dólar es el termómetro de la economía: las tensiones internacionales, la incertidumbre local, el movimiento en el valor del petróleo, casi todo se refleja en él. Y el caso colombiano no es ajeno a esa dinámica.
Los especialistas de LatinFocus Consensus, que mensualmente les miden el pulso a los principales indicadores económicos de la región, señalan que el peso colombiano se ha venido apreciando desde que el Congreso de la República puso en pausa la agenda de reformas del presidente Petro.
Sin embargo, no esperan que se mantenga así el resto del año. Aunque los vientos de recesión económica en el mundo empiezan a diluirse, en Estados Unidos la FED continuaría subiendo sus tasas de interés para no dejarle ventaja a un posible retorno de la inflación al alza.
Los datos de Bloomberg indican que, en lo corrido de 2023, el peso colombiano se ha valorizado 18 por ciento, superando a las divisas de Albania, México, Sri Lanka y Hungría, que se han fortalecido entre 15 y 16 por ciento. El polo opuesto está en la libra libanesa, que este año se ha debilitado 89 por ciento frente al dólar.