Se cuentan los días para las elecciones finales en Estados Unidos y la carrera por el puesto en la Casa Blanca se hace cada vez más interesante después de un nuevo debate televisivo en el que hubo de nuevo controversia.
El actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su rival, Joe Biden, se enfrentaron de nuevo y sacaron a relucir temas de interés público como la gestión de la pandemia, inmigración, cambio climático e industria petrolera.
El último debate estuvo marcado por sus disímiles posturas sobre la gestión de la pandemia, inmigración, cambio climático e industria petrolera.
La pandemia
«Cualquiera que sea responsable de tantas muertes no debería seguir siendo presidente de Estados Unidos «, lanzó Biden a Trump en la apertura del debate, advirtiendo que el país se enfrenta a un invierno «oscuro» en un momento en que ya hay más de 222.222 muertos por la COVID-19 en el país.
Trump, que fue infectado por el virus y tuvo que ser hospitalizado hace tres semanas, afirmó que su gobierno combate «enérgicamente» la pandemia.
Kim Jong Un y Hitler
El último debate consagró una parte importante a la diplomacia y Biden aprovechó de atacar a Trump por su vínculo con el líder norcoreano Kim Jong Un.
«Él habló de su buen amigo, que es un matón», afirmó Biden, acusando a Trump de legitimar a Corea del Norte.
Pero Trump respondió que se reunió con el líder norcoreano en tres ocasiones y con ello logró alejar la amenaza de una «guerra nuclear».
A lo cual Biden respondió exasperado: «Es como decir que teníamos una buena relación con Hitler antes de que invadiera Europa, el resto de Europa. Por favor».
Petróleo y estados claves en la contienda
El candidato demócrata asumió un riesgo al afirmar que si resulta elegido iniciará una transición gradual para dejar de depender de la industria del petróleo.
Trump reaccionó raudo instando a los estados clave de Texas, Ohio y Pensilvania a que recuerden esta afirmación, en un momento en que el demócrata parece liderar la carrera en estos feudos claves para llegar a la Casa Blanca.
Además el mandatario -que sostiene posturas que cuestionan el cambio climático- afirmó que Estados Unidos tiene el «aire y el agua más limpios» en años y desestimó energías renovables como las eólicas afirmando que matan a los pájaros.