El Rey de España, nueve presidentes, cuatro vicepresidentes y ocho cancilleres de más de treinta países participaron este domingo 7 de agosto en la toma de posesión del Presidente de Colombia, Gustavo Petro.
En el acto de investidura del Jefe de Estado para el período 2022-2026 estuvieron presentes el Rey Felipe VI de España, los presidentes de Argentina, Alberto Fernández; Bolivia, Luis Arce; Chile, Gabriel Boric: Costa Rica, Rodrigo Chaves; Ecuador, Guillermo Lasso; Honduras, Xiomara Castro; Paraguay, Mario Abdo Benítez, y República Dominicana, Luis Abinader.
Así mismo, la Enviada Especial de México, Beatriz Gutiérrez Müller; el Primer Ministro de Curazao, Gilmar Simon Pisas, y los vicepresidentes de El Salvador, Félix Ulloa; de Perú, Dina Boluarte; de Uruguay, Beatriz Argimón, y de la República Islámica de Irán, Seyed Mohammad Hosseini.
El Ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Carlos Alberto França; el Canciller de Argentina, Santiago Cafiero; el Ministro de Relaciones Exteriores de Perú, Miguel Ángel Rodríguez Mackay; el Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Eduardo Rodríguez Parrilla; la Ministra de Relaciones Exteriores de Panamá, Erika Mouynes, y el Ministro de Relaciones Exteriores de Portugal, Joao Cravinho.
Discurso de posesión
En una ceremonia de posesión cargada de simbolismos, Gustavo Petro, nuevo presidente de Colombia, destacó el cambio que quiere para el país, que por primera vez tendrá a un mandatario de izquierda y progresista.
Como en la campaña, Petro remarcó en un discurso de 47 minutos, el primero como presidente, los grandes lemas que le llevaron a la presidencia en las elecciones de junio.
La igualdad, la paz, el medio ambiente, las mujeres y los más desfavorecidos fueron los ejes del discurso de Petro, el economista y exguerrillero que juró ante Dios y prometió ante el pueblo cumplir la Constitución antes de vestirse con la banda presidencial con los tres colores de la bandera colombiana.
Petro estableció un decálogo de compromisos para sus cuatro años de presidencia que comenzaron este domingo y la paz es el número uno en un país marcado por la violencia, que continúa pese al acuerdo alcanzado con la guerrilla de las FARC en 2016.
En un país marcado por la violencia no sólo de las guerrillas sino del narcotráfico, Petro pidió «una nueva convención internacional que acepte que la guerra contras las drogas ha fracasado rotundamente y ha dejado un millón de latinoamericanos asesinados, la mayoría colombianos, durante estos últimos 40 años, y 70.000 estadounidenses muertos cada año por sobredosis por drogas que ninguna se produce en América Latina».
Petro defendió la ecología y la lucha contra el cambio climático. Pidió a organismo internacionales como el Fondo Monetario Internacional disminuir la deuda externa de los países para que puedan dedicar recursos a políticas ambientales.
Petro juró en el cargo a Francia Márquez como vicepresidenta, la primera mujer afro que alcanza ese puesto, y puso énfasis de nuevo en las mujeres, una de sus grandes bazas electorales.