“Las decisiones que unilateralmente tome el Eln son su entera responsabilidad, y conducen a generar crisis innecesarias que prolongan la confrontación armada y la violencia que sufren las comunidades, así como a debilitar la confianza de la sociedad colombiana en su voluntad de paz”.
Así respondió la delegación del Gobierno nacional en los diálogos de paz con el Eln, a un comunicado de esta guerrilla en el que advertía que el proceso “entraría en una fase de congelamiento” y en “una abierta crisis” por “acciones violatorias a lo pactado en la Mesa”.
La delegación del Gobierno indicó en un comunicado que “desde el comienzo del proceso de las conversaciones con el Eln, el Gobierno nacional ha cumplido a cabalidad todos sus compromisos”.
Manifestó que siempre ha estado dispuesto a encontrar salidas ante las situaciones críticas y las dificultades que ha enfrentado la mesa de diálogos.
Según el Eln, en Nariño se estaría desarrollando un diálogo regional por fuera de lo pactado y desconociendo a su delegación en la Mesa.
“El Gobierno nacional ha definido claramente como una de sus prioridades desarrollar la paz en los territorios. En este sentido, respeta y alienta las iniciativas que mandatarios locales lideran para proteger a la población y realizar transformaciones sociales”, señaló la Delegación del Gobierno.
Agregó que la “conducta y posición que asumen con relación a estas iniciativas los frentes y estructuras del Eln, no dependen ni son inducidas por el Gobierno nacional, sino responden a los clamores de comunidades cansadas de la violencia en el territorio”.
El Gobierno recalcó que en el Sexto Ciclo de Diálogos llevado a cabo en La Habana (Cuba), las dos delegaciones adquirieron compromisos contenidos en los acuerdos suscritos y conocidos por la opinión pública.
“La delegación del Gobierno en la Mesa mantiene plena disposición de avanzar en el desarrollo de estos compromisos”, puntualizó.
La delegación del Gobierno enfatizó que “está en manos del Eln valorar lo avanzado en el proceso, los compromisos cumplidos por el Gobierno, sus propios esfuerzos en función de la paz, y profundizar en una solución negociada que responda al clamor de paz de la población en los territorios”.