El presidente de la Federación de Empresarios del Transporte de Carga (Fedetranscarga), Henry Cárdenas, ha urgido al Congreso a tomar medidas para evitar la concreción de la anunciada subida en el precio del galón de ACPM por parte del Gobierno nacional.
Según esta asociación gremial, el aumento previsto a partir de febrero del próximo año podría acarrear la bancarrota total de los transportistas, un escenario que advierten podría provocar una crisis en la distribución de alimentos a nivel nacional.
Cárdenas expresó su preocupación en estos términos: «Vengo a compartir la profunda inquietud que embarga a los transportistas. Si efectivamente los costos del combustible aumentan, nuestra operación se volverá insostenible y, como resultado, se verá obligada a detenerse en todo el territorio colombiano».
Asimismo, hizo hincapié en que esta situación generaría un impacto negativo al elevar las tarifas de transporte y encarecer el costo de vida de todos los colombianos a la hora de adquirir alimentos.
El líder de Fedetranscarga advirtió que, de mantenerse la subida del precio del ACPM, estarían al borde de la «quiebra inminente», ya que se verían forzados a negociar un incremento de aproximadamente el 30% en las tarifas a nivel nacional, lo que, a su vez, afectaría el Índice de Precios al Consumidor.
Cárdenas subrayó la importancia de que el precio del ACPM no se eleve en esta coyuntura difícil. Señaló que actualmente el sector enfrenta graves desafíos, con 16 conductores fallecidos, un aumento en la inseguridad en las carreteras, una disminución del 16% en las importaciones y un crecimiento del 5 o 6% en las exportaciones en Colombia. Por ello, solicitó encarecidamente al Congreso que entable conversaciones con el Gobierno para frenar el aumento del ACPM.
Frente a esta situación, los camioneros hacen un llamado a la realización de mesas técnicas con el Gobierno nacional, las cuales, según afirman, han estado esperando durante más de un año.