Pasadas las 4:18 de la mañana de este viernes, un fuerte y prolongado movimiento sacudió a Santander. De acuerdo el Servicio Geológico Colombiano, SGC, el movimiento tuvo una magnitud de 5.9 con epicentro en Los Santos.
La profundidad del sismo fue de 150 kilómetros y se estima que su localización se dio a 11 kilómetros de Los Santos, en el nido sísmico del cañón del Chicamocha. Nuevamente, en los celulares se activó la alarma de terremoto y la potencia del movimiento se sintió en varias ciudades del país como Bogotá, Antioquia, Valledupar y Manizales.
«Ante el sismo presentado a las 4:18 a.m, desde la @OGRDSantander realizamos verificación y monitoreo con las entidades de Socorro, @PoliciaColombia, @COL_EJERCITO y Juntas de acción Comunal, cuyo reporte a esta hora es que no hay afectaciones en vidas ni en infraestructura», escribieron en la cuenta de Twitter de la Unidad de Gestión del Riesgo de Santander.
En ciudades como Bogotá en varios edificios residenciales se registraron evacuaciones. Cientos de personas se acordaron del peor susto por un sismo que han vivido en los últimos años: aquel 10 de marzo, pero de 2015, en fechas que coinciden.
El calendario marcaba la misma fecha de este viernes, pero era 2015 a las 3:55 de la tarde. A esa hora, un fuerte sismo con magnitud de 6.6 grados en el municipio de Los Santos, a una profundidad de 161 kilómetros, se convertía en el movimiento más fuerte registrado en los últimos 50 años en el departamento y en un punto de referencia para futuros sismos.
El temblor de hace ocho años tuvo una magnitud de 6.6 grados, dos décimas más que el del Eje Cafetero, y duró unos 30 segundos. Por fortuna, la profundidad fue alta (161 kilómetros) y por ello los efectos del movimiento telúrico no tuvieron el impacto de terremotos como el de Armenia, que fue de 6,4 grados, pero fue a 16 kilómetros de profundidad.