Comprar vivienda es una de las transacciones más valiosas para las familias colombianas que requiere una importante inversión, sin embargo, una de las principales barreras para hacerlo es no tener la cuota inicial porque el dinero no alcanza y la capacidad de ahorro es baja.
De hecho, según Fincomercio, el ahorro promedio de una persona que gana un salario mínimo en el país, es de $1.000 diarios, llegando a un total de $30 mil pesos mensuales.
En el país durante 2021 cerca de 12,85 millones de personas en Colombia ganaban un salario mínimo o menos. Por tal razón, el ahorro de los colombianos en su mayoría no es suficiente para contar una cuota inicial. Por ejemplo, para un apartamento de $150 millones por medio de un crédito hipotecario y una cuota inicial de 30%, que corresponde a $45 millones, le tomaría a un comprador 125 años acceder a esta.
Ahora bien, los créditos hipotecarios son una de las formas de financiamiento más comunes en el país, así las financieras cubren el 70% del valor del inmueble. Mientras que, el leasing habitacional, una opción en la que las entidades bancarias financian entre el 80% y el 90% del valor de la propiedad.
Esta modalidad funciona como un contrato de arrendamiento con opción de compra, durante la vigencia del contrato el propietario del inmueble será la entidad financiera es decir, el pago mensual incluye la amortización de la deuda y los intereses, lo que permite que al finalizar el plazo de pago, el beneficiario del contrato sea el nuevo propietario al ejercer la opción de compra.
Una de las ventajas de este producto financiero, es contar con tasas de interés más bajas que las de un crédito hipotecario, además de tener un proceso legal más rápido. De acuerdo con información de la startup, el leasing habitacional es uno de los principales productos financieros, con el que las familias colombianas adquieren su vivienda, no solo por los ahorros que puede generar en gastos de escrituración y avalúos, sino también por posibilitar mayores porcentajes de financiación, lo que requiere un menor esfuerzo para la cuota inicial.
A la hora de comprar vivienda es necesario tener presente todas las opciones financieras que existen y escoger la que mejor se adapte a las necesidades de cada familia.
“Fomentar la cultura del ahorro en las familias colombianas a través de buenos planes educativos que permitan conocer las mejores prácticas para conseguir la cuota inicial, además saber los beneficios y auxilios de las diferentes entidades, son fundamentales para mejorar el acceso a la vivienda y que cada vez sean más los colombianos que pueden cumplir el sueño de tener casa propia”, concluye Londoño.