La pandemia impactó significativamente el bolsillo de los colombianos, las deudas por el uso de tarjetas de crédito en los primeros nueve meses de 2020 y 2021 fue de $30,19 billones y $30,32 billones, según cifras de Superfinanciera. La economía se ha ido reactivando poco a poco, y para muchos hogares iniciar el año libre de deudas es una de las grandes metas.
Para lograr este objetivo en 2022, David Nieto Martínez, director del programa de Finanzas de la Universidad El Bosque comparte algunos consejos:
Analizar la situación económica. Uno de los principales aspectos que se debe tener en cuenta y que se debe realizar de manera realista, organizar en un listado todos los pendientes económicos que se tengan, con el fin de evitar sobreendeudamientos que más adelante no se podrán cubrir.
Determinar la cantidad de deudas que se tienen y crear un presupuesto. Pueden ser de corto, mediano y largo plazo con el fin de crear un presupuesto en el que se les dé prioridad a necesidades como: alimentación, vivienda, servicios, entre otros, para no incurrir en gastos innecesarios.
Priorizar obligaciones. Modelos como “la bola de nieve” proponen que se deben cubrir las obligaciones más pequeñas con el fin de empezar a generar mayor flujo de efectivo y abonar a las más grandes, esto permitirá que paguemos en menos tiempo y ahorremos dinero en el pago de intereses.
Evitar los gastos “hormiga”. Estos pequeños gastos como: tinto, cigarrillos, empanadas, entre otros, no se tienen presentes al momento de hacer el presupuesto, ya que pensamos que no representan una gran suma de dinero. Sin embargo, es uno de los egresos que más genera salidas de efectivo y que terminan afectando nuestro flujo de caja.
Buscar alternativas de ahorro. Existen muchos instrumentos financieros de ahorro como los CDT´s, fiduciarias, cuentas de ahorro, entre otros. Algunos expertos mencionan que se debe ahorrar el 20% del total del ingreso, pero en caso de que esto no se pueda cumplir, se debe destinar un valor fijo de ahorro en cualquiera de los vehículos financieros mencionados, con el fin de promover este, bajo las condiciones de ingreso que se tenga.
Evitar realizar avances en tarjetas de crédito para cubrir las deudas. No es aconsejable pagar estas con más deudas, ya que se asumen costos adicionales lo cual lleva a que el endeudamiento inicial se eleve. También se debe considerar que las tasas de interés por avances son bastantes altas, sumando las cuotas de manejo que ya se tienen con la entidad financiera.
Considerar la compra de cartera. Siempre han sido una herramienta útil a la hora de mejorar las condiciones financieras de las personas, permitiendo tener un alivio financiero al cubrir deudas con tasas de interés muy elevadas, sin embargo, hay que evaluar que las condiciones que propongan las entidades financieras favorezcan en ahorro de tiempo e intereses.
Procurar no usar las cesantías para pagar deudas. Estas son un ahorro que debe esta enfocado en vivienda, educación o ser un “colchón” si la persona se queda sin trabajo. Por ello hay que buscar otras alternativas para el pago de las deudas.
“Existen diferentes aplicaciones que permiten que las personas ahorren y lleven el control de sus gastos, para empezar lo más importante es que se adquiera el hábito de realizar este ejercicio a diario y así entender mejor sus finanzas personales y corregir lo que están haciendo mal.
Adicional a esto es importante que entendamos que el estar libre de deudas nos permitirá hacer inversiones para incrementar nuestro patrimonio”, menciona Nieto Martínez.