Las afectaciones a la salud derivadas del estrés financiero pueden provocar complicaciones como depresión, alteraciones del sistema inmune o problemas cardiovasculares, entre otras afecciones, de acuerdo con el estudio COVID-19 Global Impact, realizado por Cigna.
Lo anterior va en línea con los resultados del estudio de Bienestar Financiero en Colombia 2019 de la consultora Mercer, el cual mostró que el 54% de la población económicamente activa en el país siente algún grado de estrés por su situación financiera actual.
Lo anterior hace de la planeación financiera una tarea imprescindible para determinar las opciones y recursos de los que una persona puede disponer y que le permitan disfrutar de una adecuada salud y bienestar financiero a futuro. En 2022 puede suponer un reto para la mayoría de los colombianos, ya que el 77 % de los hogares no alcanza a ahorrar un porcentaje de sus ingresos, de acuerdo con las más recientes cifras entregadas por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE).
Según los expertos del Banco Popular, filial del Grupo Aval, entre los mayores desafíos que presenta la gente a la hora de planear sus finanzas está el de tener claro el presupuesto mensual, trimestral y anual; llevar un control de los gastos cuando se utilizan productos financieros como las tarjetas de crédito; invertir de forma segura en iniciativas que generen rentabilidad, por ejemplo, en acciones conociendo el mercado; y no sobreendeudarse.
Por esta razón, analizar la situación económica actual y definir unas metas o propósitos de mediano o largo plazo, es algo esencial hoy en día. Para disminuir los síntomas del estrés financiero, es necesario establecer medidas que permitan un mayor control. De acuerdo con Clara Inés Cepeda, Gerente de Cuidado del Cliente del Banco Popular, filial del Grupo Aval, estos son 5 consejos para disminuir el estrés financiero y realizar una adecuada planeación en el 2022:
Establecer un fondo para imprevistos: es importante prever los gastos ante posibles situaciones inesperadas, para evitar endeudamientos adicionales o la afectación del ahorro. Los expertos del Popular sugieren destinar un valor periódico para este fin, y que este fondo solo esté disponible para estas eventualidades.
Organizar metódicamente los gastos: se recomienda llevar un adecuado control de los gastos, de manera constante y en periodos de tiempo determinados, para así garantizar que este propósito de gastar lo necesario se cumpla adecuadamente. Así mismo, se recomienda evitar compras innecesarias, hacer un adecuado manejo de los créditos para evitar endeudarse por encima de su capacidad y realizar un balance al finalizar el mes, trimestre y/o año, para saber cómo se encuentra su bolsillo en cada época.
Familiarizarse con los términos financieros: normalmente las entidades financieras manejan conceptos, cifras e información que pueden resultar complejos para las personas; por esta razón los expertos recomiendan construir un vocabulario financiero básico y asociarlo a su gestión financiera. Para ello, es importante entender cómo funcionan los productos bancarios, y qué significan conceptos como intereses, amortización, costos de los servicios y descuentos o alianzas que pueden ofrecer los mismos.
El ahorro como seguro para una mejor calidad de vida: incentivar el hábito de ahorrar ayuda a rebajar los niveles de estrés causados por el manejo del dinero, así como a contribuir con la sostenibilidad económica de las personas y sus hogares. Por tal motivo, es necesario definir una meta de ahorro, el tiempo en el que se realizará (diario, quincenal, mensual o trimestral), los canales y los montos, a través de mecanismos de ahorro seguros y confiables; los expertos recomiendan ahorrar el entre 15% o20% de los ingresos mensuales.
Apoyarse en los simuladores financieros: con estas herramientas las personas pueden controlar y organizar el manejo del dinero, haciendo seguimiento a sus ingresos y gastos. Las entidades financieras como el Banco Popular disponen de estas ayudas en su portal de Internet, en el cual se diligencia de manera anónima información de los ingresos, los gastos; y posteriormente el sistema arroja la distribución recomendada que debe hacer de su presupuesto.