La refinería de Ecopetrol en Barrancabermeja empezó a cargar desde esta semana 227 mil barriles de petróleo por día, alcanzando los niveles que procesaba antes de la declaratoria de emergencia sanitaria por la COVID-19, en febrero del presente año.
El aumento fue posible gracias a la entrada en operación de la Unidad 250 de Crudos, que reanudó su mantenimiento mayor el pasado mes de septiembre cuando la refinería pudo reactivar los trabajos que habían sido interrumpidos temporalmente en marzo.
Ecopetrol dispuso la reactivación gradual de sus actividades de mantenimiento siguiendo estrictos protocolos de bioseguridad. En la Unidad 250 laboraron 457 trabajadores, 100% mano de obra local, quienes cumplieron con las medidas de distanciamiento físico, uso del tapabocas y máscaras media cara con filtro P100, y lavado frecuente de manos.
Estas medidas fueron acompañadas de toma de pruebas PCR para la COVID-19 como requisito para la vinculación laboral del personal, así como pruebas permanentes de seguimiento, lo que garantiza la protección de la vida de los trabajadores y el control del riesgo por la enfermedad, al tiempo que minimiza los contagios.
La Unidad 250 carga cada día 42 mil barriles, en su mayoría crudos pesados y ácidos, y por la tecnología que maneja de corte profundo, contribuye con la maximización de rendimientos de medios (jet y diésel) y de gasóleos para las unidades de Craqueo Catalítico e Hidrocracking Moderado.
Carlos Guillermo García, gerente de la refinería de Barrancabermeja, dijo que la responsabilidad y disciplina de los trabajadores en el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad permitió atender con oportunidad el crecimiento paulatino en la demanda de combustibles y finalizar con éxito los mantenimientos mayores que estaban suspendidos por la pandemia.
“En marzo bajamos a 120 mil barriles por día, pudimos llegar en mayo a 140 mil barriles diarios y en junio alcanzamos los 180 mil. Ahora hemos superado los 220 mil barriles por día y estamos listos para responder a la demanda creciente de gasolina, diésel y jet, y de otros productos petroquímicos necesarios para la industria, como los aromáticos, el polietileno y el asfalto”, explicó el gerente de la refinería.
Inversiones en actualización tecnológica y sostenibilidad ambiental
Durante 2020 la refinería de Barrancabermeja realizó 12 paradas de planta, además de las intervenciones en calderas, turbogeneradores y tanques, e inició la ejecución de 17 proyectos de actualización tecnológica para mejorar su confiabilidad y desarrollar operaciones ambientalmente sostenibles.
Las inversiones que se ejecutan este año suman cerca de US$130 millones y buscan asegurar la vigencia de sus activos para lograr la confiabilidad mecánica y operacional de sus unidades, garantizar nuevos ciclos de funcionamiento, entregar combustibles limpios y productos petroquímicos que demandan los mercados nacionales e internacionales y minimizar sus potenciales impactos ambientales.
Entre las inversiones se destaca la actualización tecnológica de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales Industriales (PTAR), que comprende la construcción y puesta en servicio de un sistema de amortiguación para la mejora del control hidráulico en eventos de alta pluviosidad, con un avance del 91%, y la actualización de los tratamientos para asegurar la calidad del vertimiento de aguas residuales industriales.
También se destaca la actualización de las unidades de tratamiento de sodas nafténicas y cresílicas y el proyecto de segregación de aguas en la zona sur de la refinería, que contribuye a mejorar el manejo hidráulico en la conducción de las aguas lluvias y aceitosas.
Las paradas de planta y los proyectos emplearon a 4.000 trabajadores a lo largo del año, el 99% mano de obra local. Además, participaron 26 firmas contratistas que vincularon a un considerable número de empresas locales.