¿Cómo diferenciar síntomas de influenza y resfriado común con los de la COVID-19?

Si bien las medidas de prevención y autocuidado nos ayudan a evitar la COVID-19, de la misma manera también nos permiten reducir otras infecciones respiratorias agudas -IRA como la gripa o resfriado y la influenza. Sin embargo, todos somos susceptibles a presentar síntomas que es importante diferenciar antes de entrar en alerta.

“El uso correcto del tapabocas, el lavado de manos, el distanciamiento físico
y el evitar aglomeraciones permite reducir las posibilidades de contagio tanto de la COVID-19 como de las IRA; y aunque en ambos casos estamos hablando de infecciones respiratorias, debemos reconocer cuales son los síntomas clave del nuevo coronavirus”, indicó José Alejandro Mojica, médico pediatra e infectólogo del Ministerio de Salud y Protección Social.

La COVID-19 puede presentarse de manera leve, moderada o severa y la
evidencia indica que la tos seca, fiebre mayor o igual a 38 grados
centígrados con escalofríos y sensación de ahogo son los síntomas más
habituales. Otros menos frecuentes, pero también asociados al nuevo
coronavirus son malestar de garganta, dolor de cabeza, pérdida del olfato y
gusto, estos dos últimos síntomas no presentes en resfriado común o gripa ni en la influenza.

Mientras tanto, los síntomas más frecuentes para el resfriado común o gripa y la influenza son congestión nasal, secreciones por la nariz, ojos llorosos, escalofríos, estornudos, sensación de cansancio, garganta irritada, dolores corporales, tos y sensación de malestar general, algunas personas pueden tener vómitos y diarrea, aunque esto es más común en los niños que en los adultos.

“Aunque son síntomas que pueden ser similares, es importante
diferenciarlos, sumado a identificar si la persona tuvo contacto con alguien
con diagnóstico de covid-19, eso permitirá evaluar qué cuadro de infección
presenta”, dijo Mojica, añadiendo que en todo caso se deben consultar los
servicios de salud a través de la EPS y autoaislarse junto al núcleo familiar,
hasta haber descartado si es COVID-19.

Para el caso del covid-19, las personas presentan síntomas cinco días
después de haber sido infectadas, sin embargo, pueden aparecer apenas a
los dos días de la infección o recién después de 14 días. “El rango de tiempo
puede variar”, precisa Mojica. Por su parte para resfriado común es de 1 a 2
días y para influenza de 1 a 4 días de haber contraído la infección.

Capacidad de transmisión


Las personas pueden propagar el virus, tanto en el caso del covid-19 como
en la gripa y la influenza por al menos un día antes de experimentar alguno
de los síntomas.
Si una persona tiene covid-19 podría ser contagiosa por un período más
prolongado que si tuviera influenza y se ha evidenciado que los niños más
grandes y los adultos con influenza son más contagiosos durante los
primeros 3-4 días de la enfermedad, pero muchos siguen siendo contagiosos
por aproximadamente 7 días; y los bebés y las personas con sistemas
inmunitarios debilitados pueden ser contagiosos incluso por más tiempo.


“Y aunque aún se está investigando por cuánto tiempo una persona puede
propagar el virus que causa el covid-19; es posible que las personas puedan
por aproximadamente 2 días antes de manifestar signos o síntomas,
permanecer contagiosas por al menos 10 días después de la primera
aparición de los signos”, dijo Mojica, añadiendo que una persona
asintomática o cuyos síntomas desaparecen, puede seguir contagiando por al menos 10 días después de su resultado positivo en la prueba de detección
de la COVID-19.

Se destaca que el coronavirus tiene la característica de propagarse rápida y
fácilmente a muchísimas personas y provocar la propagación continua entre las personas a medida que el tiempo avanza.

“Tanto la COVID-19 como la influenza pueden provocar enfermedades graves. El riesgo de complicaciones en niños sanos es mayor en el caso de la
influenza en comparación con el nuevo coronavirus”, indicó y no obstante,
tanto los bebés, los niños y adultos con afecciones subyacentes, tienen un
mayor riesgo de contraer tanto la influenza como la COVID-19 y de
complicaciones incluso fatales.

Covid-19 e influenza representan riesgos

El experto recordó que ambas enfermedades pueden provocar
complicaciones, entre ellas: neumonía, insuficiencia respiratoria, síndrome de insuficiencia respiratoria aguda (es decir, líquido en los pulmones), sepsis, lesión cardiaca (por ejemplo: ataques cardiacos y accidentes
cerebrovasculares), insuficiencia multiorgánica (insuficiencia respiratoria,
insuficiencia renal, shock), agravamiento de afecciones crónicas (que
involucran a los pulmones, el corazón, el sistema nervioso o la diabetes)
inflamación del corazón, cerebro y tejidos musculares, infecciones
bacterianas secundarias (es decir, infecciones que ocurren en personas que
ya han sido infectadas por la influenza o el covid-19).

“Y mientras que la mayoría de las personas que contraen influenza se
recuperarán en un periodo que va desde unos pocos días hasta menos de
dos semanas, algunas personas desarrollan complicaciones mencionadas”,
dijo Mojica, añadiendo que otras complicaciones asociadas al covid-19
pueden incluir: coágulos de sangre en las venas y arterias de los pulmones,
corazón, piernas o cerebro y el síndrome inflamatorio multisistémico en
niños escolares (MIS-C).

Para tener en cuenta la mejor alternativa es evitar enfermarse a través del
autocuidado, mantener distanciamiento físico y social, lavado de manos y de superficies, y el uso del tapabocas; principalmente los grupos de riesgo como los mayores de 60 años y personas con comorbilidades como hipertensión, diabetes, cáncer, entre otras enfermedades crónicas.

“Las medidas contra el covid-19 funcionan para las otras IRA, de ahí la
importancia del cuidarnos y el cuidar a los demás, y recordar que el único
virus respiratorio prevenible por vacunación es el de la influenza, de allí la
importancia de la vacunación cada año. Para el caso del covid-19 mientras
esté lista una vacuna, debemos seguir cuidándonos”, concluyó Mojica.