Luego de la terrible explosión en el puerto de Beirut, que dejó más de cien personas muertas y más de cuatro mil heridas, el Líbano comenzó a recibir apoyo de la comunidad internacional.
La situación es crítica debido a que algunos de los hospitales de la ciudad resultaron dañados por la devastadora onda explosiva, a lo que se suma el hacinamiento producto de la atención a pacientes con covid-19.
Las autoridades de ese país analizan las causas de la explosión pero inicialmente determinaron que 2.750 toneladas de nitrato de amonio que estaban almacenadas en el puerto sin ninguna vigilancia desencadenaron la tragedia.
De acuerdo con versiones extraoficiales, hace pocas semanas se produjo un hurto en la bodega por lo que se determinó sellar la puerta con soldadura. Cuando el soldador estaba en el procedimiento, se habría producido la conflagración que desató la tragedia.
La destrucción del puerto implicará consecuencias económicas nefastas y se suma a una crisis económica que estaba viviendo ese país, la peor desde que finalizó la guerra civil que se llevó a cabo entre 1975 y 1990.
Holanda y Francia tienen equipos de trabajadores humanitarios que ya llegaron a Beirut. La ministra holandesa de Cooperación al Desarrollo, Sigrid Kaag, confirmó que 67 trabajadores holandeses, incluidos médicos y enfermeros, ya se encuentran en la capital libanesa.
Fuentes de la presidencia francesa informaron del envío de dos aeronaves, con 55 personas, 15 toneladas de material, así como una unidad sanitaria móvil que permite atender a 500 heridos.
Rusia también anunció el envío de cinco aviones con médicos, rescatistas y equipos sanitarios que estarán equipados con medios de protección contra la COVID-19 y tendrán a su disposición un laboratorio móvil para hacer pruebas de coronavirus en el lugar.
Las autoridades de República Checa también dispusieron de un avión con un equipo de 37 especialistas de su unidad de rescate y rastreo urbano y los griegos ya enviaron a su Unidad Especial de Desastres.
El papa Francisco llamó a la comunidad internacional a ayudar al Líbano a superar la grave crisis.