Michelle Bachelet,, Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, expresó su preocupación por los enfrentamientos en Cali, que dejaron más de una decena de muertos, y pidió diálogo y una investigación independiente.
«Es esencial que todas las personas que presuntamente causaron lesiones o muerte, incluidos funcionarios del Estado, estén sujetas a investigaciones rápidas, efectivas, independientes, imparciales y transparentes, y que los responsables respondan ante la ley», dijo la funcionaria.
Cali, con unos 2,2 millones de habitantes, es epicentro de violentas protestas y bloqueos de vías que exasperan a una parte de la población.
Arrinconado por las protestas, el presidente Iván Duque desplegó el Ejército en la ciudad bajo la figura de asistencia militar que permite a los soldados apoyar a la Policía en las tareas de vigilancia.
Un total de 13 personas murieron en diferentes episodios, entre ellas un funcionario de la Fiscalía que mató con su arma a dos manifestantes que bloqueaban una vía. La turba se abalanzó sobre el hombre, que estaba fuera de servicio, y lo linchó.
La Alta Comisionada indicó que su oficina recibió informaciones sobre individuos armados, incluido el oficial fuera de servicio, que habrían disparado en dirección a los manifestantes, periodistas y transeúntes, así como sobre la muerte de dicho funcionario.
«Pido que se ponga fin a todas las formas de violencia, incluyendo el vandalismo, y que todas las partes sigan hablando, para que se garantice el respeto por la vida y la dignidad de todas las personas», indicó la expresidenta chilena.
Bachelet llamó así al diálogo para resolver las demandas de los manifestantes y de los que se oponen a las protestas y celebró «el compromiso expresado por varios actores, en Cali y a nivel nacional, de encontrar una solución negociada y pacífica».
La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos en Colombia indicó haber recibido información de al menos 30 personas detenidas el 28 de mayo. Bachelet urgió así a garantizar «un juicio justo» y a prevenir las desapariciones.
Desde el 28 de abril a diario se movilizan multitudes para protestar contra el Gobierno por los abusos policiales y el manejo de la crisis económica que trajo la pandemia.