Desde muy temprano las filas empezaron a formarse en uno de los puntos de vacunación de la ciudad. La cita era con los profesores de las 17 instituciones educativas que entraron en el plan piloto destinado por el Ministerio de Salud.
Antes de entrar al coliseo Yesid Santos, los docentes debían registrarse en una base de datos, pasaron a una estación para informar sobre alergias, enfermedades, patologías o toma de medicamentos y una vez adentro, tomaron asiento en las sillas dispuestas a lo largo y ancho del Coliseo. Allí debían esperar a las vacunadoras, que pasaron aplicando la primera dosis de la vacuna, no sin antes, mostrarles el estado del frasco y explicarles la cantidad que se les iba aplicar.
Henrique Álvarez, fue uno de los primeros en recibir la vacuna. Es profesor de Artes en la Institución Educativa José Acevedo y Gómez que también fue una de las primeras instituciones en retomar clases en alternancia.
“Yo estoy muy contento porque es un privilegio. Nosotros estamos ya en alternancia y el riesgo que corren los estudiantes y nosotros es muy alto, sin estar vacunado asumí el reto, imagínese ahora. Los estudiantes valen la pena, la ciudad vale la pena”, afirma el docente.
Álvarez tiene 54 años y no se imaginó ser vacunado tan pronto. Justo, al lado de la silla de él, se encontraba Jorge Luis Rojas, profesor de Tecnología de la misma institución y al igual que Henrique, no pensó que recibiría el biológico tan rápido, pero ambos estan felices y con el deseo de volver a a ver los salones de clases repletos de estudiantes sin temor al contagio.
“Invito a los padres a que envíen a sus hijos al colegio sin miedo, la Secretaría de Salud y de Educación, han realizado un trabajo arduo para cumplir con todos los protocolos de bioseguridad en los planteles para que los niños, niñas y jóvenes estén seguros”
Después de recibir la dosis, debieron esperar 15 minutos para verificar los posibles efectos adversos de la vacuna y con certificado en mano y un respiro de tranquilidad, uno a uno fueron saliendo del Coliseo rumbo a sus lugares de trabajo, ya que la alternancia llevó de nuevo a los estudiantes a las aulas. En 21 días estos mismos docentes se reunirán de nuevo para recibir la segunda dosis de la vacuna.