El patrullero Ángel Zúñiga, quien se despojó de su arma y equipos de dotación y no quiso participar de un desalojo de familias desplazadas ordenado por un fallo judicial, dijo que todo lo hizo por ayudar a las personas humildes.
“Es respeto con la Constitución, eso fue lo que me llevó a mí para poder ayudar, además les estaban violando muchos derechos”, señaló.
El patrullero contó que les sacaban sus pertenencias, llegaba la máquina y les aplastaba todo lo que tenían.
“Nadie los apoyaba y les estaban violando derechos y ayudé a esas personas”, afirmó.
Según cuenta el uniformado, no era el único que se sentía mal, con impotencia de lo que estaba pasando, pero que por más amor que le tenga a la institución busca siempre ayudar a la comunidad.
“Cuando me dan una orden yo evalúo si esta es para bien o para mal, y si es para mal no la hago. Yo decido si camino ciego o abro los ojos”, afirmó el patrullero.
La decisión del Patrullero generó muchas reacciones en las Redes Sociales: