A diez semanas de que reabra sus puertas, la catedral Notre Dame de París, que sufrió un grave incendio en abril de 2019, está restaurada al «98 %» y solo le faltan «algunos acabados», dijo Philippe Jost, el responsable de su reconstrucción y conservación.
«Falta instalar el mobiliario litúrgico, las obras de artes que allí estaban (antes del incendio) y trabajos de limpieza en la plaza de entrada (…) No nos faltarán cosas que hacer en las diez próximas semanas, pero estamos dentro del plazo, por lo que tenemos confianza», detalló el alto funcionario, que habló a los medios pocos metros de la catedral durante el debut de las jornadas europeas del patrimonio.
Notre Dame, un templo gótico que se construyó entre el siglo XII y el XIV, es uno de los monumentos más visitados del mundo que ha sufrido varios vaivenes en su larga historia, el más grave de ellos el incendio del 15 de abril de 2019 por el que las llamas devoraron la aguja de la catedral y la techumbre.
Desde entonces, el templo ha estado cerrado al público y, gracias a la donación de 850 millones de euros, sobre todo por parte de empresas y mecenas, logrará reabrir sus puerta el 8 de diciembre de 2024. «Podemos estar felices y orgullosos del camino recorrido (…) Notre Dame ha reencontrado su lugar en la silueta de París», agregó Jost, quien destacó la dimensión internacional del monumento.
Para evitar incendios como el de 2019, el templo contará con un conjunto de avanzados sistemas, comenzando por uno de vaporización en la zona de la carpintería de la techumbre. El sistema emitirá agua vaporizada en caso de que los sensores detecten el inicio de un fuego.