La Alcaldía de Medellín destacó los resultados del trabajo conjunto entre las autoridades para asestar golpes contundentes contra los delitos comunes y de alto impacto, en este caso contra el tráfico y distribución de estupefacientes.
En tres operaciones diferentes, la Policía Metropolitana, unidades de investigación y uniformados de vigilancia lograron cinco capturas contra estructuras dedicadas al tráfico de estupefacientes y a surtir expendios ilegales en la ciudad.
La operación más importante de la jornada se dio tras la investigación adelantada por la Sijín de la Policía Metropolitana. Luego de un trabajo de recolección de información fue hallado abandonado un vehículo tracto camión, tipo cisterna, en el barrio La Iguaná, sobre la vía al Occidente. En su interior, gracias al olfato de un canino especializado de nombre “Izco”, se encontraron 100 kilos de clorhidrato de cocaína, ocultos en los compartimentos.
“Durante el año, la Policía ha capturado 1.177 personas por este delito, de las cuales 1.159 han sido en flagrancia. Esto es una muestra de la capacidad de reacción de las unidades, articuladas al sistema de videovigilancia, con las cámaras siempre dispuestas a ser una herramienta poderosa”, dijo el subsecretario Operativo de Seguridad, Ómar Rodríguez Aranda.
En otro procedimiento, en el barrio Guayabal, uniformados sorprendieron a dos hombres cuando bajaban tres bolsas plásticas de un vehículo. Al notar la presencia policial, las personas se pusieron nerviosas e intentaron evadir a los uniformados. No obstante, tras ser reducidos, se les encontraron 2.400 tubos plásticos que en su interior contenían marihuana y 490 cigarrillos del mismo estupefaciente.
Por último, las patrullas del Modelo Nacional de Vigilancia Comunitaria por Cuadrantes, los radioperadores y visualizadores del Sistema Integrado de Emergencia y Seguridad detuvieron a tres personas dedicadas a la comercialización de estupefacientes: uno tenía 70 gramos de cocaína, otro 100 gramos de base de coca y una mujer de nacionalidad extranjera llevaba 800 gramos de marihuana.
En total, fueron 109 kilos de estupefacientes que no llegarán a las calles y que representan aproximadamente 20.000 dosis, de las cuales se evitó su comercialización ilegal.