
La gente de Medellín es especial. A pesar de las dificultades, los habitantes de
esta ciudad son valientes y han sabido enfrentar los problemas y dificultades para
convertirlos en oportunidades. Aquí es posible emprender y hacer realidad las
ideas que para otros parecen imposibles.
En Medellín se mezclan el pasado y el presente, lo rural y lo urbano, que la hacen
única. Ese acento paisa que seduce a muchos, se ha vuelto sinónimo de
emprendimiento, verraquera, cultura y pujanza.
No es casualidad que los máximos exponentes actuales de la música urbana
encontraran su lugar en Medellín, así como antes lo hicieron las gordas del
maestro Botero. Definitivamente, en nuestra ciudad, el arte y la cultura vibran en
todos los rincones.
¡Qué orgullo ser de Medellín! ¡Qué orgullo vivir aquí!