Indígenas embera que acampan en Bogotá regresan a sus tierras en Chocó y Risaralda

Unos 700 indígenas que acampan en el parque Nacional en Bogotá desde finales de 2021, desplazados por la guerra interna en Colombia, retornarán a sus comunidades a partir de esta sábado 7 de septiembre, anunció el gobierno en un evento oficial.

Cientos de emberas que huyeron de los conflictivos departamentos de Chocó y Risaralda malviven en el céntrico Parque Nacional de la capital, bajo toldos de plástico, con cocinas de leña y unos pocos baños públicos.

Al menos 24 niños indígenas fallecieron entre 2021 y 2023 por las precarias condiciones de vida en el lugar, según cifras de la alcaldía local.

“Hemos hecho un esfuerzo enorme para construir las condiciones de vida digna que les permita retornar”, aseguró el viernes en un discurso la directora de la Unidad de Víctimas del conflicto armado, Lilia Solano.

Un pequeño grupo de 11 personas va a “integrarse en Bogotá”, añadió. Delegados del gobierno izquierdista de Gustavo Petro se reunieron este viernes con los indígenas en un acto público en el Parque Nacional.

Las mujeres con trajes tradicionales y los hombres con el bastón de mando, celebraron el anuncio de su pronto retorno. El gobierno se compromete “a crear garantías” para el regreso de los emberas a sus resguardos, dijo Solano.

Los pueblos originarios han sido tradicionalmente desplazados de sus territorios en Colombia por la violencia de los grupos armados. En Chocó y Risaralda operan principalmente el Clan del Golfo, el principal grupo narco del país, y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), una guerrilla guevarista fundada en la década de 1960 que sostiene actualmente atropellados diálogos de paz con el gobierno de Petro.

Petro intenta desactivar por medio del diálogo el conflicto armado de seis décadas que ha dejado 9,5 millones de víctimas, casi el 90% de ellos desplazados. De acuerdo con datos de la alcaldía, unas 370.000 víctimas de la guerra se han instalado en Bogotá. Los desplazados conforman casi el 5% de la población capitalina de 8 millones de habitantes.

El retorno de los indígenas se hará en tres jornadas, según la Unidad de Víctimas. El primer grupo, de 58 familias, retornará a comunidades aledañas al municipio de Pueblo Rico, en Risaralda. Otras 146 familias se distribuirán en varios asentamientos del departamento de Chocó. Y un tercer grupo se trasladará a otras tres localidades de Risaralda. Otras 39 familias serán reubicadas temporalmente en otra localidad.