Se posesionó del cargo la nueva defensora del Pueblo, Iris Marín Ortiz

El presidente, Gustavo Petro, posesionó a Iris Marín Ortiz como la nueva defensora del Pueblo, la primera mujer que ocupa ese cargo, quien se comprometió a trabajar por la defensa de los derechos humanos, la paz y avanzar en la eliminación de las violencias basadas en género.

«Renuevo el compromiso por esa paz basada en la igualdad, a través del acuerdo mancomunado de todas las autoridades para cumplir el acuerdo de paz de 2016, así como para seguir buscando el fin de la violencia causada por los conflictos que persisten y por la criminalidad organizada», dijo Marín en la ceremonia realizada en la localidad de Nuquí, departamento del Chocó.

Marín (Bogotá, 1977) ha trabajado en organismos de derechos humanos como la Comisión Colombiana de Juristas (CCJ), el centro de pensamiento Dejusticia o en la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento (Codhes) y también en organismos estatales como la Unidad de Víctimas.
La defensora, que tendrá un mandato que finalizará en 2028, recalcó que la entidad a su cargo que fue creada hace 33 años debe ser «una institución con talante moral y ético que no pertenezca a ningún sector, a ningún partido político, a ningún grupo de poder».

Agregó, igualmente, que seguirá trabajando «con la gente que la ha venido construyendo durante 33 años», entre ellos los Defensores Comunitarios. «Me comprometo a que la Defensoría del Pueblo estará liderada por un equipo directivo con trayectoria y formación en derechos humanos, diverso y mayoritariamente conformado por mujeres que ejerzan su labor con independencia de sectores de poder, que sean incorruptibles y que tengan vocación de servicio por la comunidad», afirmó.

También subrayó que trabajará en los territorios para renovar el compromiso por la paz basada en la igualdad. «La igualdad en el disfrute real de los derechos de todas las personas sería la verdadera realización de la paz», recalcó la nueva defensora del Pueblo.

Además, dijo que trabajará desde las regiones, a fin de escuchar a todas las comunidades: «Ser canal de entendimiento, de alivio, y un puente frente a las diferencias que no deberían separarnos sino unirnos».
En la ceremonia Marín recibió de manos de lideresas un libro, que representa las voces de las víctimas; un mapa violeta, que representa la lucha por los derechos de las mujeres y las niñas, y un reloj, porque «es la hora de la defensa de los derechos humanos».

Por su lado, el presidente Petro aseguró que Marín tiene la responsabilidad de manejar una entidad «que no se puede silenciar ante la injusticia». Marín, elegida de una terna propuesta por el presidente Petro, reemplaza a Carlos Camargo, elegido en el mandado del entonces presidente Iván Duque (2018-2022), quien renunció en mayo al cargo de este organismo de derechos humanos cuando faltaban menos de tres meses para terminar su período de cuatro años.