Uno es veloz y malabarista; el otro, cerebral y dueño de una zurda privilegiada. Juntos, Luis Díaz y James Rodríguez se complementan en una dupla que ilusiona a Colombia con el título de la Copa América de Estados Unidos 2024.
El dúo comandó la clasificación de los cafeteros a cuartos de final al pulverizar 3-0 el viernes a una Costa Rica que amagaba con cerrar su arco con llave, la fórmula que le permitió salir ilesa de su sorprendente estreno ante Brasil (0-0) en el Grupo D.
Pero el talento del extremo del Liverpool y del otrora ’10’ del Real Madrid desactivaron el dispositivo sin mayores rollos: ‘Lucho’ al anotar desde el punto blanco su primer gol del certamen y James al sumar su tercera asistencia en la actual edición del torneo de selecciones más antiguo del mundo.
«Lo más importante es que pasamos a la siguiente ronda», afirmó a la transmisión de televisión Rodríguez, capitán de un seleccionado cafetero que, a pesar de sus actuaciones y números de encanto (25 partidos invicta), se niega a considerarse favorita.
La situación del zurdo de 32 años es alucinante, pues en sus últimos clubes ha pasado desapercibido gracias en buena medida a sus problemas físicos. Al Sao Paulo llegó como rey en julio pasado y su continuidad es un misterio. Pero en Colombia brilla porque «tiene un equipo que lo rodea bien y que le da alternativas a su juego», dijo el técnico Néstor Lorenzo al término de la victoria contra los ticos en la abrasante Glendale, Arizona.
Contra rayos y centellas, el argentino confió en James desde que asumió el comando de los cafeteros, en junio de 2022, tras el fiasco de no haber clasificado al Mundial de Catar. Para entonces el ’10’, autor de 27 goles y 30 asistencias en 102 juegos internacionales, se había tornado en una figura de amores y odios en su tierra.
Algunos lo consideraban un exfutbolista debido a sus lesiones recurrentes y a la opacidad que tenía en sus clubes. Otros se rendían a su recuerdo, especialmente al talento derrochado en la histórica participación en Brasil-2014, cuando los cafeteros cayeron en cuartos de final con los locales.
En aquel Mundial, del que fue goleador (6), marcó un gol antológico contra Uruguay (2-0) en octavos, elegido el mejor tanto de la competición. Lo hizo el 28 de junio de 2014 en el Maracaná de Rio de Janeiro.
Y exactamente diez años después, el 28 de junio de 2024, volvió a iluminar a su país con una asistencia con su pierna débil, la derecha, para que el delantero Jhon Córdoba sellara la cuenta contra los centroamericanos.
«Ahora corre menos y piensa más», sostuvo Lorenzo. «Sé del amor que tiene por estos colores, por eso me dolió mucho cuando lo criticaron tanto, por eso confié en él, porque su compromiso con la selección es supremo». Además de brindar su tercer pase gol, ya había servido dos en el debut victorioso contra Paraguay (2-1), exigió al portero Patrick Sequeira con un zurdazo, hizo dos centros precisos malogrados por el zaguero Davinson Sánchez y cedió el penal al atacante de los Reds.
«A Luis Díaz y a James Rodríguez hay que marcarlos diferente», dijo el DT de Costa Rica, Gustavo Alfaro, antes de que los colombianos los vencieran e hilaran diez victorias consecutivas. El extremo, dueño de la camisa ‘7’, abrió el marcador con un disparo desde el punto blanco que lo adentró en el top-10 de goleadores históricos de Colombia, con trece dianas en 51 cotejos. Cinco de ellos han sido en la Copa América, una competición que le sienta muy bien.
En la edición pasada, en Brasil-2021, compartió con el argentino Lionel Messi el primer lugar de la tabla de artilleros, cada uno con cuatro, y se graduó de nueva esperanza del balompié cafetero. «Más que mi gol, rescato lo que hizo el equipo en todas las fases del juego. Lo está entregando todo», afirmó Díaz, de 27 años, alentado por su carismático padre, Luis Manuel ‘Mane’ Díaz, desde la tribuna del Stade Farm Stadium.
La presencia del dúo frente a la ‘Canarinha’ el martes en Santa Clara, California, en el cierre de la llave, es el arma más fuerte para asegurar la punta de la zona y enfrentar en cuartos al segundo del Grupo C, integrado por Uruguay, Estados Unidos, Panamá y la eliminada Bolivia. A la tricolor, campeona del certamen americano en 2001, le basta un empate para asegurar el liderato. Pero esta
Colombia no es conformista