Generar cultura alrededor de una responsable ocupación del territorio es lo que se proponen las Secretarías de Gestión Territorial y de Medio Ambiente a través de la estrategia “Como habitar en mi ciudad”, que ha impactado a más de 500 niños y niñas de Buen Comienzo, quienes han recibido información, de manera recreativa, sobre los riesgos de las construcciones en laderas y cerca a afluentes.
Una adaptación del clásico cuento infantil “Los tres cerditos”, ha permitido atrapar la atención de los niños y las niñas al resultar asombrados cuando en medio de la narración descubren que dos de los cerditos pierden sus casas por estar construidas al lado del río o en la parte alta de la montaña. Las inquietudes de los niños surgen en medio de un proceso pedagógico en el que los gestores territoriales responden y van creando cultura ciudadana desde la primera infancia y que impactará a futuro en la ciudad de Medellín.
“Gestores territoriales es el componente social de nuestra subsecretaría de control urbanístico, los gestores territoriales llegan a los jardines de Buen Comienzo, y a través de todo tipo de herramientas pedagógicas le enseñan a los niños de nuestra Medellín Futuro cómo debe ser un adecuado proceso constructivo, esos niños de hoy, serán los adultos, los jóvenes del mañana que sabrán cómo se planifica la ciudad”, explicó Gabriel Correa Escobar, subsecretario de Control Urbanístico de la Alcaldía de Medellín.
“Hoy Medellín necesita niños y niñas con conciencia territorial, es por eso que venimos trabajando en una estrategia pedagógica para sensibilizar a nuestros niños y niñas frente a la conservación de los recursos naturales y frente a todo el tema relacionado con la gestión del riesgo y las construcciones en laderas. Construimos cultura ciudadana desde nuestros Centros y Jardines Infantiles en aras de seguir modelando la Medellín Futuro”, añadió Hugo Díaz, director de la Unidad Administrativa Especial Buen Comienzo.
Además del cuento infantil, los gestores territoriales generan actividades en las que involucran a las familias fomentando una sana discusión sobre la forma adecuada de habitar la ciudad.
La estrategia avanza de igual forma en colegios y universidades en donde se invita a las buenas prácticas alrededor de la ocupación de la ciudad y se forman líderes conscientes de los riesgos de las construcciones en zonas inadecuadas.