El lugar donde la fiesta está llena de color, magia, noche, luces, maquillaje, vestidos y un estilo exagerado, que permite sorprender la noche con tacones y trajes que adornan el cielo y lo ponen a brillar como las estrellas, fue el escenario del Ball de las Flores, ubicado en el hangar del aeroparque Juan Pablo II. Allí el brillo se encendió y el talento salió a escena.
El Ball de las Flores es la muestra de la diversidad y una apuesta de la Alcaldía Distrital de Medellín, donde el color, la alegría y el baile son protagonistas para florecer, celebrar y compartir la vida y la revolución del amor a través de la igualdad, respeto y aceptación por la diferencia.
Por primera vez en Medellín estuvo la cantante La Tenaz, una mujer quindiana, que con mucha inspiración le canta al amor, al estallido social y a la diversidad. “Veía la Feria de las Flores muy conservadora y tradicionalista, pero llegar a un escenario tan lindo e inclusivo, fue para mí una explosión de felicidad”.
La autenticidad, el amor propio, la lucha, la valentía, la compañía y la lealtad hacen parte de ellos y ellas; justo por su forma de ser, son o no son. Su fuerza los hace ser determinantes en su actitud; lo dan todo o nada, son el latir del corazón, que es motor de esta revolución del amor.
En tarima, el mensaje fue claro y contundente por parte de Victoria Strauss, politóloga de la Universidad de Antioquia y gestora cultural de la ciudad, como ella se denomina: “Soy la mamerta, la travesti y la rara” Ella fue invitada al escenario para brindarnos un mensaje de esperanza y de amor que trascendió en cada corazón que allí lo escuchó. “Nuestros cuerpos y nuestras identidades, resisten y se transforman, como esa energía que no desaparece; por más que nos asesinen, ella se transforma”.
Un mensaje profundo que nos llevó a pensar en la eternidad de nuestra existencia, de disfrutar de quienes somos y en quien nos convertimos para vivir. Victoria complementa su mensaje con una frase de la performance y maestra Ana Luna Feral: “Nunca olvidamos reencarnamos, porque nuestras identidades resisten y continúan también reinventándose una y otra vez, resistiendo también para no morir y ser olvidadas”.
Medellín, se ratifica como ciudad diversa y asume su compromiso con la población LGBTIQ+ y sus derechos, haciendo parte de la Red Latinoamericana de Ciudades Arcoíris. Establece el fortalecimiento en el ejercicio de los derechos de estos colectivos y organizaciones, así como la ejecución de acciones afirmativas para el reconocimiento de esta población. Dicho esto, llega la segunda versión del Ball de las Flores.