Durante una visita de control que realizó este viernes la secretaria de Salud de Floridablanca, Olga Caballero, junto con su equipo de profesionales, se constató que las piscinas del Parque Acualago no son criaderos de vectores.
“La comunidad puede estar tranquila que las piscinas en este momento no son potenciales para criaderos de la larva para Aedes aegypti. Lo que sí encontramos en la visita fue que debido a las lluvias hubo unos estancamientos de agua en las alcantarillas y en los depósitos de máquinas donde se decidió aplicar el larvicida, que se llama abate, para evitar que proliferen las larvas”, señaló la jefe de la cartera de Salud.
La funcionaria dijo además que las piscinas son hoy un ecosistema de charca donde se implementó como método de control biológico la siembra de peces larvívoros, los cuales se convirtieron en poderosos depredadores de zancudos.
“Durante el recorrido que hicimos encontramos que permanecen los peces larvívoros, encargados de devorar todas aquellas larvas que son potenciales transmisores de dengue”, informó la secretaria.
Por su parte, el biólogo de esta Secretaría, Javier Herrera, explicó que “estos peces se tienen que colectar en fuentes hídricas del mismo municipio de Floridablanca. Son dos especies que tenemos acá, poecilia y gambusia, y son los encargados de hacer el control en dado caso que existieran formas inmaduras de zancudos. Ellos se encargan de devorarlas y alimentarse de ellas”.
En un reciente ensayo realizado por la Secretaría de Salud, en el que se colectaron peces, se evidenció que uno de estos animales puede devorar en cinco minutos más de 50 larvas.